Gregory llega a las Seychelles huyendo de la ciudad y de la vida moderna. En el trópico espera encontrar el paraiso: el sol calienta los cuerpos, las olas acarician la piel desnuda y el paisaje se abre con una belleza tan sólo superada por la de las calientes mujeres que salen a su paso. Pero cuando penetra en este paraiso, no tarda en darse cuenta de que aquí no todo es tan virgen como pensaba… sobre todo si hay dinero de por medio.